Al adentrarnos en el universo escénico de "Vuela", uno se da cuenta enseguida de que el amor tiene mil puertas, llaves, cerrojos y sólo una salida. No siempre encontramos la más acertada. A veces volamos en el cielo del placer creyendo que somos libres, pero en realidad somos esclavos de un falso sentimiento de penitud. Hay quien apuesta por el amor sincero y lo acaba encontrando; quien sólo tiene amor hacia si mismo y nunca es correspondido. Hay quien cree que el amor no existe y vive en una feliz ignorancia. Otros piensan que no hay amor sino sexo, y se engañan con falsos esquemas morales. Por eso hay quien no puede volar tan alto como quisiera. Esta obra teatral, la más personal e instrospectiva del joven director Juan Francisco Viruega, nos invita sencillamente a "volar" allá donde quisimos y no nos dejaron, allá donde soñamos y no nos atrevimos, allá donde sabemos que algun dia iremos aunque nos cueste dar el salto. Todos nacemos con alas, y el viento sopla cada día a favor. Solo hay que elegir la direccion acertada y atrevernos a ser libres con nuestros propios sentimientos, no sólo hacia la pareja sino también con nuestra propia familia. "Vuela" nos propone decir un "Te Quiero" a tiempo, abrazarnos a quien nunca lo hacemos por pudor, vergüenza o falta de costumbre. Nuestra madre, nuestros hermanos, nuestros amigos son el entorno más próximo, quienes mejor nos conocen y siempre nos perdonarían la mayor infidelidad.
Para quien piensa que el amor no es universal, para quienes creen que el amor del mismo sexo no es amor sino vicio, y para quienes sueñan y tienen la esperanza de encontrar algún dia el amor verdadero, que siempre llega a tiempo.
Para quien piensa que el amor no es universal, para quienes creen que el amor del mismo sexo no es amor sino vicio, y para quienes sueñan y tienen la esperanza de encontrar algún dia el amor verdadero, que siempre llega a tiempo.